Resumen:
En la evolución de sociedades postmodernas se incrementa la problemática
educativa de quienes no adquieren una formación personal a través de una
buena escolaridad, provocando la necesidad de proyectos sociopedagógicos que
no llegan a subsanar las dificultades de la marginación social. Una esperanza
surge en nuevas propuestas ludocreativas como las ludotecas. Sin embargo, es
de considerar que una atención a los niños y jóvenes implica también una
especial atención con actividades de expresión a los adultos que los
sustentan cotidianamente.
El impulso lúdico:
El
juego es una cualidad de los mamíferos, que nacen inacabadamente y que se
desarrollan a través de un proceso evolutivo, siempre con posibilidades de
aprender dada su capacidad de jugar y su necesidad de integrarse en la
complejidad de su sobrevivencia. Es decir de combinar la percepción de sus
sentidos con la imaginación que le permite subvenir a sus necesidades básicas
y también de complementar el uso de su energía en actividades ludocreativas
que lo perfeccionan en conocimientos y habilidades.
Partiendo
de una visión antropológica, el impulso lúdico es un atributo del sujeto que
se traduce en actividades objetivadas como los juegos, en aplicar su
curiosidad en juguetes y en el uso de múltiples herramientas; inclusive
desenvolviendo formas teatrales donde al reírse de sí mismo puede tomar
consciencia de su situación. Todo objeto puede ser un juguete, lo esencial es
la interacción que se activa con los sujetos.
El
impulso lúdico es una potencialidad del sujeto, pero para su ejercicio
depende en mucho de su contexto de vida, que le brinda posibilidades reales
de satisfacción o de frustración. Como individuo recién llegado al mundo,
tiene mucho para aprender y por ende mayor necesidad de expresarse jugando.
La ludicidad es una libertad de experimentarse y proyectarse.
El
impulso lúdico está inserido en el instinto de vida, es en él que se asocian
la curiosidad y la experimentación, en contraste con la racionalidad que se
despliega frente a la lógica de una tarea objetivada. Aunque, ambas
dinámicas, sustentadas por los deseos de aprender y las expectativas de
realización, frecuentemente se culminan en un resultado satisfactorio o en
una frustración que desencadena un nuevo desafío.
A medida que la sociedad vista como un todo es capaz de liberar tiempo de la sobrevivencia, se facilita una prolongación del tiempo de ensayos lúdicos inicialmente ubicados en la infancia, prefigurando habilidades y conductas que lo llevan a encontrar formas de alimentarse, vivir y relacionarse. Ensayos siempre necesarios y que en un momento u en otro serán de actualidad para lograr un desenvolvimiento de individuo social.
En
tiempos históricamente recientes tales ensayos se desarrollaban en el ámbito
familiar, en el encuentro comunitario o en recreos de la escolaridad; sin
embargo realidades socioeconómicas han fragmentado tales espacios quitando
oportunidades a muchos niños y jóvenes, para quienes hoy día se necesita
instalar nuevos espacios de ludicidad y socialización. Surgiendo de hecho,
numerosos programas de recreación y recientemente una acelerada
multiplicación de ludotecas.
La
recreación es una propuesta que surge en contraste con el trabajo: -por la
intensidad del compromiso personal, por el estilo de su aplicación
bioenergética o por la finalidad social-. La recreación busca compensar lo
tedioso y el estrés laboral de la aplicación a la producción, pero se aplica
en un espacio definido como ocio social, o tiempo libre de la persona. Sin
embargo estos conceptos no corresponden a las mismas realidades según
regiones geopolíticas y según los estatus económico de las personas: ha
existido y existe un tiempo libre para quienes integrados a la sociedad
disponen de un saldo económico suficiente para auto dispensarse un tiempo
personal para sus gustos o preferencias.
En
otras regiones u para otras personas ese tiempo no existe; aunque un número
importante de personas pueden encontrarse dentro de un grupo humano que
recibe la aplicación de un plan de recreación, precisamente porque no pueden
auto-organizarse un tiempo denominado libre, dado que no tienen una
suficiencia económica, o que presentan una insuficiencia de formación para el
tiempo laboral o con incisivas carencias culturales. También desde el punto
de vista del funcionamiento social, existen realidades de zonas urbanas o de
comunidades locales que necesitan espacios de esparcimiento para el
equilibrio de la convivencia.
Respondiendo
a necesidades básicas de niños y jóvenes se crean muchos proyectos socio
pedagógicos que ocupan un espacio de educación no formal; un espacio
organizado para quienes ante la necesidad de integrarse socialmente
encuentran muchas dificultades en la modalidad de educación e instrucción
formalizada por la escuela y los estudios de profesionalización básica; es
una problemática tipificada en familias, pero sobretodo es una distorsión del
sistema educativo global que aún no asume a todos los ciudadanos en su
diversidad.
Las
Ludotecas:
En
Latinoamérica existen varias Asociaciones nacionales de ludotecas y una
Federación Latinoamericana (Flalu): Desde su fundación en el 1986 la Flalu
asume seminarios para la formación de ludotecarios; hasta 1996 difundía un
boletín informativo en castellano y portugués, con el cual se fue orientando
rumbos y creando relaciones por toda Latinoamérica. Luego fue el equipo del
Espacio Creativo de La Paz, Bolivia, que asumió el boletín informativo en
forma virtual; y actualmente tenemos uno en castellano que lo difunde el
equipo de México y otro en portugués que lo asume el equipo de la Universidad
Federal de Río Grande do Sul, en Brasil; ambos vía Internet. Ciertamente que
existieron y existen otras formas de difusión asumidas por otras tantas
Instituciones que también contribuyeron a la propagación de la propuesta de
Ludotecas.
a) En
México está la Asociación que asume directamente la actividad de ludotecas,
desarrolla Cursos de formación de Ludotecarios y participa periódicamente de
la organización de un Congreso junto a la Universidad Nacional. En varios otros
países de América Central, también hay programas de Ludotecas o proyectos
fundamentados en la Lúdica: Nicaragua, Costa Rica, San Salvador, Panamá e
igualmente en el Caribe: en Cuba y en la Republica Dominicana, donde
recientemente iniciamos una red de Ludotecas.
b) En
países del Pacifico como Chile, Bolivia, Perú, Ecuador existen también
ludotecas y proyectos lúdicos relacionados con la utilización de Plazas
públicas o planteando una relación a la escolaridad. En Perú particularmente
implantadas en zonas rurales. Inclusive, en el caso de Bolivia, donde se
reciben a jóvenes universitarios, estudiantes de psicología y de ciencias
sociales que realizan sus prácticas en las ludotecas de plazas públicas.
c) En
países del Atlántico sur como Argentina y Uruguay existen proyectos de
Ludotecas relacionados con programas de asistencia social de Municipalidades,
asumiendo la labor frente a los niños en sus barrios, conformando equipos con
docentes que han elegido trabajar en la Educación No Formal o como Institución
cultural abierta a las comunidades,
d)
Brasil y Colombia son los países con mayor cantidad de Ludotecas y de Eventos
centrados en la Lúdica como factor de incidencia en la cobertura educativa.
En ciertos casos respondiendo a un plan de la Presidencia, en otros casos de
los Gobernadores de grandes ciudades o de Municipios; principalmente asumidos
por iniciativa de docentes sensibles a las problemáticas educativas
ocasionadas por carencias socioculturales, generadas en insuficiencias
económicas. Aunque actualmente la necesidad y el placer brindado por las
ludotecas ha superado las diferencias de estratos socioeconómicos y ellas son
solicitadas por todos los niños. Recordemos que en Brasil surgió la
experiencia del “Circo do Povo” (Uberaba, 1985) que ha servido de ejemplo y
estímulo para innumerables ensayos lúdicos; reuniendo en un mismo proyecto
una atención cultural a la comunidad y un específico espacio de expresión
ludocreativo para los niños y jóvenes.
Muchos
proyectos están vinculados a sus respectivas Asociaciones nacionales, otros
asumiendo su originalidad independientemente. De por la naturaleza de la
actividad existen también vínculos con Fundaciones que tienen programas de
recreación o del llamado tiempo libre o de asistencia social. Esta vocación
de las Ludotecas por responder a necesidades socioeducativas ha sido una
caracterización desde sus inicios en Latinoamérica: originariamente
proclamada en el acta de fundación de la Flalu, en 1986; ha sido
recientemente confirmada en la Investigación patrocinada por la UNESCO y
realizada por Educadoras Colombianas a través de un proyecto de la Fundación
Cielo, en el año 2003.
Desde
sus orígenes en Latinoamérica, las Ludotecas han sido diversas: según
contactos pedagógicos al instalarse o respondiendo a modalidades de quienes
las han financiado:
a) respondiendo al estilo Europeo, se iniciaron con un cúmulo de juguetes, sus consabidas clasificaciones y diversas formas de administrar el tiempo de préstamo de los mismos. b) respondiendo a autoridades locales, se centraron en la problemática de la atención multiforme a niños o jóvenes y como extensión social de propuestas recreativas. c) respondiendo a orientaciones de la Flalu, se caracterizaron por abrir espacios de actividades de expresión ludocreativas para una heterogeneidad de niños y jóvenes, considerando fundamental la integración en la Comunidad educativa.
“Las
ludotecas son un espacio social de expresión ludocreativa, para niños,
jóvenes y adultos. Tienen como principal finalidad aquella de favorecer el
desarrollo de la persona en una dinámica de interacción lúdica.
Específicamente, estimula el proceso de estructuras afectivo cognitivas del
niño, socializa creativamente al joven y mantiene el espíritu de realización
del adulto” (R. Dinello ’93) Corresponden a necesidades de integración social
y de creación cultural.-
Unas se
comunican con otras y se intercambian las múltiples propuestas de atención.
Lo cual ha generado que en diversas Instituciones y Universidades se realizan
encuentros y seminarios de formación de Ludotecarios que van desde la
reconstitución de los juegos tradicionales hasta la organización de aulas
articulando la actividad lúdica con las materias de aprendizajes escolares;
insistiendo así en una fundamental renovación metodológica.
Las
Ludotecas han atravesado el modernismo, asumiendo consecuencias sociales de
la industrialización acelerada; luego, confusamente fueron comparadas con una
recreación en el tiempo libre que nunca llegó a Latinoamérica; en la
actualidad, se encuentran enfrentadas a la permanencia de un desequilibrio
social que sumerge en una indigencia educativa a una parte importante de la
población infantil y juvenil de Latinoamérica. Realidad, que en estos pasados
20 años las Ludotecas han sabido enfrentar con el entusiasmo de la
solidaridad, con la alegría de los juegos y con la esperanza de educadores.
Considerando
perspectivas mínimas, las ludotecas se plantean redescubrir el placer de la
ludicidad y de la creatividad; considerando amplios horizontes, se plantean
la educación integral, precisamente de aquellos mas necesitados de un
reconocimiento de dignidad. A las ludotecas, como toda Institución formando
vínculos entre los individuos y la sociedad, se le ofrecen las posibilidades
de transformarse en un agradable pasatiempo o de asumirse en las conflictivas
que implican un crecimiento del sujeto; sobretodo con una sensibilidad en
valores de convivencia de la comunidad y en la comprensión ecológica del
medio ambiente.
De
hecho, las realidades sociales donde se desenvuelve el proyecto, la formación
de base de las personas que se asumen como ludotecarios y la dinámica propia
de los niños y jóvenes participantes van dando el perfil de cada ludoteca. No
obstante, se pueden apreciar ciertos elementos que tienen una mayor
incidencia: a) la dependencia a los fines del organismo que asume las
financias. b) la cualidad de la creciente profesionalización del equipo de
educadores lúdicos. c) la necesidad de una profunda relación al Sistema
general de Educación e Instrucción, como forma de asegurar una articulación
entre proyectos sociopedagógicos y la perspectiva de una mejor Integración
social de cada niño o joven.
En los
hechos, se manifiesta una necesidad de analizar y elaborar planteamientos
tanto metodológicos como organizativos para asegurar su funcionamiento y
orientar los vínculos con las finalidades educativas que toda Nación tiene
para con sus niños y jóvenes.
Se está
verificando una evolución en las originalidades formas de los proyectos pero
también se constata que sigue existiendo un importante desequilibrio en la
cobertura educativa; lo cual plantea una duda sobre como se implantan y
desarrollan los proyectos sociopedagógicos no formales o sobre la no
incidencia de estas experiencias sobre el sistema formal que todo Estado
sostiene en su territorio. Todo proyecto educativo debe plantearse en la
continuidad: el aprendizaje de hábitos, valores y principios de la relación
interpersonal se confirma en procesos durables. La atención a los niños
implica una atención a sus progenitores o adultos que los sustentan
diariamente. Implica abrir espacios de actividades de expresión para los
adultos.
a)¿Son
siempre las mismas causas económicas que provocan el desarraigo social?
b)¿Se es consciente de la marginación que provoca el sistema educativo formal y que las experiencias de educación no formal no logran revertir? c)¿Sería posible intercambiar experiencias afines para mejorar los dos sistemas? d)¿En cuanto es indispensable confirmar un sentimiento de solidaridad en los docentes o educadores afín de lograr nuevos y decisivos aprendizajes en la niñez? e)¿Que incidencia tienen los proyectos ludocreativos en la formación de ciudadanía?
Preguntas
que surgen en el intento de comprender los tiempos que vivimos y ante la
esperanza de extender la cobertura educativa a la totalidad de niños;
respondiendo así a las expectativas emanadas del reconocimiento de la
Convención sobre los derechos de la niñez.
Las
ludotecas tienen en la actualidad dos grandes desafíos pedagógicos: uno, muy
general, que, a través la lúdica se extienda un aprendizaje para convivir
entre generaciones; otro, especifico, referente a los niños o a los jóvenes
en particular, de reencontrar el placer del aprendizaje, retomando el ciclo
de formación que muchos han interrumpido.
Ello no significa sustituirse al magisterio formal, pero si emplear una metodología esencialmente ludocreativa para que cada niño o joven reencuentre el deseo de instruirse, de inscribirse en el aprender permanentemente. Las ludotecas pueden así representar una esperanza en el proceso de evolución humanística del continente.
Dr.
Prof. Raimundo Dinello: E-mail: mundodin@adinet.com.uy
Web: http://www.expression-ludicocreative.org/ Web: http://www.fortunecity.com/victorian/daddio/658 Boletín informativo: Breves de Amexlud: amexlud@yahoo.com.mx Novidades: quemquerbrincar@ufrgs.br Bibliografía especifica del autor: “TRATADO DE EDUCOLOGÍA” Ediciones: Nuevos Horizontes Vol. Iº “Artexpresión y creatividad” Montevideo 1997 - 2005 Vol. II “Expresión Ludocreativa” Montevideo 1989 - 2005 Vol. III “Pedagogía de la Expresión” Montevideo 1992 - 2003 “Ludica y Recreación” Ed. Magisterio; Bogotá 2000 “Ludica y Creatividad” Ed. Magisterio; Bogotá 2001 “Ludotecas ludocreativas” Ed. Magisterio; Bogotá 2004 |
domingo, 28 de abril de 2013
El juego – Los juguetes – Las ludotecas Dr.Prof.Raimundo Angel Dinello
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